Ferrol. Coruña. España. 1 de Septiembre 2006

 

 

De la Terapia Ocupacional y otros quehaceres

 

 

Es para TOG un placer poder presentar este cuarto número. Desde hace seis meses el equipo de TOGtrabaja para poder tener los contenidos a punto. Un trabajo duro para poder seguir ofreciendo calidad en los artículos y sobre todo una piedra más en generar constructos cada vez más sólidos. Todo ello, para que TOG sea una de las revistas que resuene en nuestra disciplina.

 

En este número intentamos mantener un equilibrio entre los contenidos, buscando el mayor número de lectores posibles de todos los ámbitos de la disciplina. Hemos podido contar con la visión de futuro de las publicaciones de Terapia Ocupacional, con el Director de la SJOT, D. Ricardo Moreno, para la editorial de este cuarto número. Además para todos los Terapeutas Ocupacionales necesitados de guías de investigación, en la sección de revisiones, tenemos la suerte de poder contar con un artículo en el que colaboradores de elevado prestigio en este tema colaboran y continuarán colaborando con TOG en los siguientes números. A todo ello se suman los artículos que llegan a la sección de Originales y que son nuestra base para creer que TOG sigue creciendo en calidad científica.

 

El crecimiento de TOG, repito una y otra vez es gracias al compromiso de los profesionales que colaboran desinteresadamente con nosotros y que aportan sus conocimientos, además hay que sumarle el compromiso delos componentes de TOG. Agradecer a todos los profesionales que enviaron sus contenidos para su publicación y mantener el puente que cada vez es más sólido con América Latina, fuente innegable de producción científica, y que se refleja en TOG.

 

Crecer a la vez que lo hace TOG, o mejor dicho ver como TOG crece, nos hace pensar que el proyecto inicial se ve modificado por lo que acontece a su alrededor, y no solo el proyecto, también el contenido. Es para mi un orgullo ver como las personas que colaboran en TOG dedican su esfuerzo y su tiempo a esta revista. Agradecer enormemente “su”tiempo dedicado, a nuestra traductora Rocío, muchas gracias por tu dedicación, por tu esfuerzo, recomendaciones y sobre todo por tu profesionalidad. Tu ausencia, a partir del 5 número será para todos los integrantes de TOG recordada, tu comenzaste con la revista, esta revista también, es tuya, recuérdalo. Gracias por todo Rocío.

 

Al igual que en números anteriores, me gustaría realizar un inciso en esta presentación para ofrecer aspectos, que aún sabiendo difíciles de digerir en ocasiones, son necesarios.

 

El polémico sentido de las cosas que inunda el ser de los Terapeutas Ocupacionales, nos mantiene cada vez más en una situación de cierta pasividad ante lo que acontece. Son cada vez más los profesionales con iniciativa en construir una disciplina sólida, y son cada vez más los profesionales que se empeñan en destruir esas iniciativas. Desde TOG apostamos por todos esos profesionales Terapeutas Ocupacionales que se proponen como meta ofrecer su visión, su iniciativa y sus sueños al mundo de la Terapia Ocupacional alentándolos una y otra vez para que sus iniciativas sean las que crezcan con sus contenidos.

 

La necesidad de controlar, de poseer y de tener las iniciativas de los demás, empobrece la realidad de las cosas. El sentir de cada una de las iniciativas se vinculan al momento histórico en las que se producen. El crecimiento de cada una de estas iniciativas se producen porque son muchas las ideas a las que personas libremente se suman. Una iniciativa, es crecer y sobre todo es realidad cuando en ella se ponen todas nuestras fuerzas, pero esa iniciativa no crece si no es considerada como una realidad libre, que crece si la necesidad de control y que una y otra vez refuerza el sentir de nuestra profesión.

Sentir, es algo que se escapa al aburrido y cada vez más tedioso sentido del control que en ocasiones se ejerce sobre las mismas.

La revista TOG es de todos las personas que creen en ella, es “propiedad” de todos los profesionales que la leen y el control se ejerce por aquellas personas que desde la lejanía o proximidad, aportan sus ideas para construirla, no para destruirla.

 

En el momento actual, el efecto “ombligo” no nos permite ver más allá de la realidad en la que vivimos, una y otra vez seguimos viendo sombras iluminadas por una vela, que son nuestras propias sombras y a las cuales les damos el poder dela realidad sin darnos cuenta que son más que eso, sombras de una propia realidad, de una de ellas. La disciplina de la Terapia Ocupacional, se tambalea, se extiende una sombra grisácea sobre ella, llena de poder, y necesidad de poder que hace que cada vez sean más la iniciativas que crezcan por uno mismo, y no por una disciplina que es la nuestra y que sinceramente y desde una visión no apocalíptica, se tambalea.

 

Al decir tambalea, hago referencia a una evolución necesaria que no existe, unos referentes claros que no hay, una línea a seguir que hace años que falta y que hace años que estamos buscando, al son de una piñata adolescente. Buscamos algo pero para encontrarlo no miramos hacia nosotros, no como personas, sino como profesión. ¿Por qué intentamos repetir una y otra vez aspectos de nuestra profesión sin entenderlos?, ¿Por qué no se hace una involución sobre nuestra disciplina más allá de hablar una y otra vez de nuestra historia?.

 

Son muchas las preguntas sin respuestas que no tienen enunciado para formularse, pero son muchas las respuestas que se tienen a unas preguntas quizás en ocasiones mal formuladas.

 

¿Somos capaces de identificar el por qué de nuestra disciplina?, ¿En qué momento de nuestra historia surge nuestra profesión?, ¿Por qué el nombre de Terapia Ocupacional?, ¿Alguien llegó a pensar si Burton, pretendía crear una disciplina a la que llamamos Terapia Ocupacional, tal y como la entendemos en la actualidad?, ¿De qué forma evoluciona nuestra disciplina?, ¿Qué hacemos para que evolucione y sobre todo lo más importante hacia qué vertiente?, ¿Por qué cuesta tanto creer en una disciplina que nos hace “ser” Terapeutas Ocupacionales?,¿Por qué no dudamos de lo que la Terapia Ocupacional nos ofrece y resolvemos esa duda con “ella” y no con “nosotros”?.

 

No me gustaría que el lector se quedara con una visión espeluznante de esta presentación del cuarto número de TOG. Tú que eres el lector de TOG, que ahora lee esta presentación, ¿quedaste impasible ante las cosas que leíste?.

 

Desde TOG, no podemos darte respuesta a muchas de estas preguntas sin que tu seas el que participe directamente de ellas, tus artículos, tus contenidos y sobre todo tus ideas son las que resuelven, o al menos ofrecen líneas para investigar a otras personas que puede serque tengan esa respuesta. El método científico de investigación hace proponer hipótesis una y otra vez, buscando la resolución o al menos unas conclusiones que aporten algo sólido a nuestro trabajo, quizás las anteriores dudas sobre “nosotros” Terapeutas Ocupacionales, sirvan para que tu como lector des un paso al frente en la elaboración de las hipótesis que las echen por tierra o que las resuelva. Desde TOG, queremos apostar por esos artículos.

 

Recordaros, que TOG, ofrecerá a partir de este año, un monográfico al año, en esta ocasión, estaba programa para el mes de Noviembre el un monográfico sobre Geriatría, será el objetivo principal del mismo. Coordinado por Dña. Ana Isabel Corregidor Sánchez, pero por problemas ajenos a TOG, tendremos que posponerlo, que no olvidarlo. Estos monográficos serán ofrecidos totalmente gratuitos, tal y como TOG hace con todos sus contenidos.

 

Además queremos alentar a todos los Terapeutas Ocupacionales, a que participen en todos los actos que con motivo del 90 aniversario de la Terapia Ocupacional, el año próximo se celebrarán, desde TOG estamos dispuestos a impulsar y ofrecer cobertura de este evento.

 

Esperamos vuestras contribuciones para sucesivos números, recibir un cordial saludo.

 

Miguel Ángel Talavera Valverde
Terapeuta Ocupacional
Director de Revista TOG
www.revistatog.com
miguel@revistatatog.com
miguelrevistatog@yahoo.es

Revista Gallega de Terapia Ocupacional TOG. www.revistatog.com. Número 4. Septiembre 2006